GESTIONAR LA INCERTIDUMBRE

Las personas no se resisten al cambio se resisten a ser cambiadas




Nos ha tocado vivir una época en la que los cambios se suceden a una velocidad vertiginosa, de tal forma que es cierta la frase que lo único permanente es el cambio, la estabilidad es una excepción a la regla. Los paradigmas de ayer carecen de validez hoy, cuando empezamos a ser conscientes de una realidad ésta ya ha cambiado, los conocimientos que hemos adquirido tienen fecha de caducidad, ya no son para toda la vida. Cada día, en cada momento nuestro cuerpo está sometido a multitud de imputs y estímulos que nos obligan dar una respuesta, la conozcamos o no, y a estar en un permanente estado de aprendizaje y alerta.

Nuestra Sociedad es una Sociedad tremendamente compleja regida por un comportamiento sistémico que nos obliga a pensar y actuar de forma global ,escapando del pensamiento lineal sustituyendo el tradicional y unidireccional vinculo causa-efecto por una extensa red de relaciones y vínculos que interactúan y se retroalimentan, con desproporcionados efectos amplificadores o amortiguadores (El aleteo de una mariposa en China se convierte en un huracán en Arizona), mutuamente de tal forma que toda influencia es causa y efecto a la vez. Ello provoca frecuentemente que nos sintamos desorientados al obtener resultados impredecibles, desproporcionados, contradictorios y paradójicos que muchas veces las soluciones de ayer sean los problemas de hoy.

Podemos decir que ya no vale la forma de pensar en la que fuimos educados, necesitamos adquirir la habilidades y competencias para tener un pensamiento flexible y sistémico para poder gestionar nuestro entorno, sirviéndonos de los porqués y paraqués para obtener distintos enfoques y aproximaciones para resolver un tema sin echar mano de los más fáciles y evidentes. Una nueva forma de pensar que nos permita aprender nuevos significados y generar nuevas realidades.

Gestionar la incertidumbre es pasar de gestionar problemas individuales a comprender e intervenir en las relaciones y gestionar procesos enteros viendo como cada parte afecta al todo y viceversa en un entorno no predictivo presidido por la inestabilidad y el azar.

Cuando transitamos a través de la incertidumbre y la inestabilidad y no somos capaces de contar con respuestas fiables se apodera de nosotros la ansiedad y el temor o miedo nos atenaza o nos arroja al abismo por desmagnetizar nuestra brújula para tomar decisiones sobre la mejor estima y rumbo a seguir.

Cuando pensemos que estamos sin control y nos asalten esos miedos, debemos de preguntarnos además sobre la causas de los mismos , externas o por el contrario intrínsecas a nosotros, y los pensamientos que los originan, ¿Cuáles son mis filtros? ¿Cómo percibo la situación?¿Qué está en juego? ¿Cuáles son las consecuencias de la amenaza que sentimos?, para actuar en consecuencia de cara a afrontar la situación.

Es buena guía para no desfallecer y perseverar en post de nuestras metas, tener una visión potente y será ella la que nos impulse y alumbre a modo de faro para llevarnos a nuestro puerto, canalizando entonces nuestra ansiedad como energía positiva hacia el futuro deseado.

En estos casos, cuando nos adentramos en terrenos desconocidos y tenemos que afrontar situaciones nuevas y amenazantes, es cuando inspirados por nuestra visión debemos de aprender a guiarnos de nuestra intuición, tras haber seleccionando la información esencial y sopesando racionalmente los riesgos, aprender a confiar en nuestro inconsciente o sistema límbico(Gestor de emocional de nuestro cerebro) quien será capaz de replicar como mayor eficacia el pensamiento sistémico requerido. Con ello no harás más que utilizar todo la sabiduría(Inteligencia surgida de la experiencia) derivado de aprendizaje vivido e interiorizado en lo más profundo e inconsciente de ti.

En la incertidumbre encontraremos la libertad para crear cualquier cosa que deseemos.
 Deepak Chopra