No te sientas inseguro cuando pienses en el futuro. El futuro como el pasado sólo existe en nuestras mentes. Vivimos y nos relacionamos sólo en el presente y es únicamente desde esta dimensión temporal donde podemos actuar para crearlo. Para ello debemos tomar la riendas de nuestra vida y conducir nuestra existencia desde una actitud y comportamiento responsable. No pensemos que nuestro destino está marcado por nuestro pasado o por el azar. Podemos hacernos cargo de él y diseñarlo para crear las condiciones que nos provean de una existencia mejor que la actual. Recuerda que el hoy es una consecuencia del ayer. Pero ¿Cómo podemos hacerlo? ¿Cómo podemos dejar de ser esclavos de nuestro pasado? ¿Cómo podemos ser dueños de nuestras vidas?
La clave es conocer lo que hoy somos y dotarnos con una Visión. Conocernos para aceptarnos y poder actuar sobre la base de nuestras vulnerabilidades y capacidades actuales contar con una Visión que nos guíe y oriente de forma clara sirviéndonos de fuerza movilizadora hacia nuestras metas y objetivos en la vida.
Esa visión tiene que ser poderosa, conmovernos y constituir un verdadero reto que nos aliente a transformar nuestras vidas en busca de la excelencia y plenitud. Debe constituir una luz que nos alumbre e inspire en un continuo camino de superación, en el que el fracaso no existe y sólo la experiencia derivada del aprendizaje y la superación de nuestros errores ,nos permitirá ir mas allá de nuestros límites actuales, romper con nuestro pasado y construir día a día las bases y cimientos de nuestro futuro.
Una vez que sabemos que seres queremos ser, que ya conocemos que queremos hacer con nuestras vidas y nos hemos hecho una imagen clara de nosotros mismos en ese futuro próximo que deseamos, tendremos que comprometernos tanto pública como privada con esa visión y actuar en consecuencia y coherencia con ella.
Antes de comenzar a andar con firmeza hacia el futuro, tendremos primero que viajar con nuestra mente del futuro al pasado, venir desde donde vamos e ir reconstruyendo y recreando las distintas etapas de nuestro viaje al futuro para vivenciar, desde la serena y estimulante emoción del logro y la plenitud, las acciones que hemos tenido que llevar a cabo y nos permitieron llegar a él y anticipar para prepararnos los obstáculos que hemos ido apartando desde nuestro camino.
Lo importante es actuar ahora, ya , e ir paso a paso, sin desánimo, temores ni oportunidades para el desfallecimiento. Nuestras acciones de hoy irán cobrando sentido alineándose las circunstancias en torno a nuestra visión y será por el contrario nuestra visión la que nos estimule, nos habilite para superar las dificultades y afrontar la incertidumbre y de sentido a nuestras acciones, por ende nuestra existencia, por aquello del ser siendo como nueva dimensión dinámica y sistémica de nuestra realidad humana.
En ese apasionante viaje, en el que los problemas toman forma de retos, iremos viendo que lastres hemos tenido que ir soltando, de que nuevas creencias me he tenido que ir sirviendo, que cosas he ido aprehendiendo y cuales he tenido que desaprender, que nuevas habilidades he ido descubriendo en mi que me permiten avanzar.
Además en este camino no estaré sólo, contaré como aliados con mi Visión que actuará como energía telúrica alineando el Comos en mi favor y con todos aquellos testigos de mi compromiso o compañeros de viaje que se han identificado y compartido mi visión en quienes me apoyaré y me servirán de sostén para adentrarme en mi futuro. Me serviré además de mi compromiso tambien de mi confianza en mis propias fuerzas y de mi responsabilidad para hacerme cargo de mis inquietudes y temores poniendo en marcha acciones que me permitan intervenir en el futuro.
Tendré que aprender a mirar dentro y fuera de mi, gestionar mi emocionalidad y sentimientos de forma y manera que se conviertan en alíados eficaces que me habiliten para avanzar decididamente hacia ese futuro que he vislumbrado como posible y deseable para mi.
En ese camino de aprendizaje cogeré todo aquello que me sirva para fortalecer y comprometerme mi visión, dejándo atrás las creencias, juicios y comportamientos que me frenan y me alejan de mi visión. Aprenderé a sentirme libre y dueño de mis acciones, a aceptar responsablemente las consecuencias de las mismas, aprenderé a no culpar a nadie de mis errores ni fracasos y mucho menos quedar apresado por el rencor y el resentimiento , aprenderé tambien a no resignarme y creer que las cosas pueden cambiar si encuentro el modo y el momento oportuno para ello.
Pero en todo ello no te demores ni estés diletante, ¡muevete, actúa, decide! ya que la ventana hacia tu futuro es volátil y esquiva. Si el no te va a esperar, entonces Tu ¿A que esperas?
