3.28.2012

MOTIVACIÓN PARA EL SIGLO XXI






















"La Motivación nos impulsa a comenzar y el habito nos permite continuar" Jim Ryum

A pesar de constituir un tema sobre el que se ha hablado a raudales y escrito ríos de tinta, la Motivación sigue preocupando sobre manera a los Responsables y Directivos de las Empresas, sin que muchas veces estos tengan el tino y acierten tanto en  sus diagnósticos  como en las medidas que adoptan en sus Compañías para motivar a sus Equipos.

Sin pretender ni mucho menos teorizar sobre ello, si  quiero reseñar algunos aspectos que a mi juicio son clave para entender mejor cómo funciona la Motivación y por consiguiente que debemos hacer para generarla dentro de la Empresa.

Comenzaré a sensu contrario por señalar aquellas circunstancias o hechos que  su sola presencia las convierte en fuentes importantes de desmotivación. Una de las mas relevantes es la percepción de falta de Equidad y Justicia en el trato dispensado por los Superiores Jerárquicos.

 Me estoy refiriendo a las distintos sentimientos, tales como rabia, desaliento, decepción, desprecio, desconcierto…, que tenemos cuando nuestros Jefes no premian ni reconocen por igual nuestros méritos, esfuerzos y logros.

Cuando su comportamiento cuando menos es arbitrario y  percibimos que somos perjudicados al recibir un trato que consideramos injusto, en el que unos se ven beneficiados a costa de otros sin que concurran logros o resultados que los avalen. Caso claro de lo anterior es cuando la retribución no se corresponde con la de Mercado o existen claros desajustes retributivos entre personas y puestos con desempeños y requerimiento similares.

Otra cara de la misma moneda es cuando se toleran comportamientos improductivos y desleales con la Empresa y con los compañeros por parte de algunos empleados sin que tengan consecuencia negativa alguna para ellos. Una voz interna parece decirnos, hagas lo que hagas te dará igual….

Otro factor importante de desmotivación, es la falta de Ética en el comportamiento de la Empresa y sus Directivos, en relación con sus Clientes, Accionistas, Empleados y Sociedad en general. Otra voz interior, en este caso nuestra Conciencia, nos recuerda la importancia de ser éticos y honestos, provocando en nosotros el rechazo y desaliento por la doble moral e hipocresía de la que por desgracias es moneda común  en muchas Compañías.

Por último me gustaría señalar a la falta de confianza como otro elemento de claro de desmotivación. Desconfianza que nos asalta cuando no conocemos bien las reglas del juego o cuando nos falta información acerca de la Empresa, nuestros cometidos y como hacer nuestro trabajo.

 Desconfianza que  provocan actitudes distantes, insinceras, erráticas o poco previsibles por parte de nuestros Jefes. Inseguridad y desconfianza cuando observamos las carencias y limitaciones de unos Jefes a los que muchas veces no reconocemos ni consideramos capaces de hacer bien su trabajo.

Todos ellos son a mi modo de ver factores que socavan día a día la motivación de cada uno de nosotros de manera individual y en su conjunto de un Equipo.

Por el contrario ¿Que es lo que nos motiva? ¿Que es lo que nos pone en acción?

Uno de los factores mas determinantes de la motivación es hacer aquellas cosas que nos gustan y que hacemos bien. De ahí la importancia que nuestras  competencias personales encajen y se adapten a los requerimientos del Puesto que desempeñamos, de manera que podamos dedicarnos a una actividad que nos entusiasme y apasione, desarrollando y poniendo a prueba nuestras habilidades y maestría.

Además de ello nos gusta sentir que tenemos control sobre lo que hacemos por lo que gozar de autonomía y cierto grado de libertad sobre nuestro propio trabajo nos hará sentirnos mejor y mucho mas motivados. Responsabilidad, Delegación, Autonomía, son palabras que muestran su verdadero poder motivacional.

Por otra parte está en la esencia de la naturaleza humana la búsqueda de la perfección y la plenitud, por eso nos sentimos bien y motivados cuando en nuestro trabajo nos enfrentamos a retos que estimulan nuestro aprendizaje y desarrollo. De esa forma huyendo de las tareas fáciles y rutinarias  somos capaces de aceptar desafíos  consecuentes con nuestra tendencia natural  a la auto realización por medio de la consecución del logro y el crecimiento personal.

Aquí cobra importancia la valoración que hagamos acerca del logro y sus consecuencias para nosotros, así como el auto diagnóstico y expectativas sobre nuestra capacidad para lograrlo. Nos sometemos al binomio esfuerzo-recompensa -¿Merece la pena?-previa evaluación de nuestras capacidades ¿Podré conseguirlo?. De ahí la necesidad de establecer  por un lado metas retadoras pero realistas y por otra de reclutar personas positivas, entusiastas y optimistas.

Un tercer factor de motivación sería cuando lo que hacemos tiene y propósito y cobra sentido para nosotros. No necesariamente tiene que ser algo transcendente o valiosos en sí mismo, basta con que a nosotros nos lo parezca y/o seamos reconocidos por ello. Sería como aquello de algo por lo que luchar, algo por lo que vivir…….

Por último destacaría otro elemento motivacional como es el deseo de autoafirmación que todos en mayor o menor medida tenemos. Esto hace que cuanto más reconocimiento recibamos, cuanto más se destaque nuestra singularidad y cuanto más poderosos o influyentes seamos, más satisfechos e implicados estaremos. De esta forma sintiéndonos valiosos nos ofreceremos y nos convertiremos en una oportunidad para los demás.

Pero dado que somos seres eminentemente sociales y cooperativos, también podemos explicar la motivación desde esta otra dimensión social y colectiva de los Seres Humanos.

A todos nos gusta sentir que formamos parte de algo, que somos aceptados y queridos, que somos útiles y participamos en un proyecto común superior. Así podemos analizar los factores anteriores a la vista  de nuestra aceptación y capacidad de integración dentro del Equipo, el  Rol que desempeñamos, la metas individuales y colectivas que se persiguen, la cohesión que el Equipo muestra y su historial de éxitos y logros .

Desde esta perspectiva es preciso que sepamos generar en la Empresa, entornos de trabajo colaborativos, fomentando el sentido de orgullo y pertenencia a un Equipo, cuyos integrantes trabajan juntos, unidos por una necesidad y visión común, sabedores que todos tienen cabida, son importantes para el Grupo y que  la fuerza del conjunto les hace más fuertes y capaces de lograr sus metas.

Alentar la Visión, fomentar el espíritu de competición, reavivar la pasión por el juego, apelar a sus capacidades y compromisos, focalizarse en los objetivos son elementos que sin duda contribuirán a cerrar filas y permitirán alinearse mejor en torno a unas metas comunes.

Todo ello no hace sino recalcar la necesidad de construir desde distintos ámbitos, perspectivas y responsabilidades un sólido  soporte y tejido emocional que permita generar y sostener las altas dosis de motivación y compromiso que se precisan para alcanzar los desafíos a los que se enfrentan las Compañías y la Sociedad en general del siglo XXI.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Carlos, da gusto reencontrarte.
Es este un campo, el del liderazgo y las relaciones humanas, donde creo que sobra soberbia y falta un poco de humildad.

Javier B.