Los Buenos Modales son
la carta de presentación de la Inteligencia y el trasfondo de un buen Corazón
La Educación y el Estilo no
han pasado de moda aún cuando estemos rodeados de ramplonería y vulgaridad. Muy
al contrario los Buenos Modales,
además de necesarios, son rentables,
facilitando la convivencia y
abriéndonos muchas puertas en la Vida.
En nuestro Trabajo no hay excusa alguna para los Malos Modos. Con independencia de la posición jerárquica que
ocupemos no podemos perder los papeles y
mostrar desconsideración o falta de respeto hacia los Compañeros y miembros de nuestros Equipos.
Por mucho estrés al que estemos sometidos o urgencia que tengamos, y aunque sea de manera súbita y no
intencionada, tenemos que mantener siempre una actitud y comportamiento
correcto en el Trabajo. No nos
podemos permitir exabruptos ni mucho
menos dejarnos salir de nuestras casillas.
Mas allá de ser una cuestión de
mera cortesía y urbanidad, un lugar de trabajo en el que se grita; se interrumpe constantemente; se
es impuntual y no se respetan los horarios ni las agendas; se permite la burla ajena; se murmura o se molesta con ruidos y conversaciones a los
de al lado; genera desánimo y desafección además de provocar un bajo
rendimiento y productividad.
Como Jefes tenemos que ser los primeros en dar
ejemplo de corrección y buenas
maneras, mirando nuestras palabras,
evitando ser ofensivos y bruscos en el trato.
Seremos cuidadosos en no sobrepasar
las líneas del respeto personal, alejándonos de comportamientos prepotentes o sexistas en los que abusamos de nuestra posición y condición.
No hay que caer en trampa de los insultos y descalificaciones ni sostener una actitud vociferante y desafiante
para hacernos entender. Debemos de ser asertivos
y controlar nuestras emociones evitando responder con cajas
destempladas como muestra de nuestro enfado, frustración o desaprobación.
Tampoco hay que ser complacientes ni tolerantes con los Malos Modos ya que además de ser altamente contagiosos constituyen una prueba evidente de mala educación que contamina el ambiente de trabajo y erosiona seriamente las relaciones personales
Tampoco hay que ser complacientes ni tolerantes con los Malos Modos ya que además de ser altamente contagiosos constituyen una prueba evidente de mala educación que contamina el ambiente de trabajo y erosiona seriamente las relaciones personales
Mas Cortesía, Señorío y Fair Play, Por favor..¡¡¡¡Gracias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario