Allí donde hay una empresa de éxito alguien tomó alguna vez una
decisión valiente.Peter Drucker
Emprender o no emprender ..? Esa es la cuestión que se plantean
muchos jóvenes, y no tanto, que ante la falta
de oportunidades del Mercado Laboral
o su expulsión del mismo ven en montar un negocio una clara oportunidad para enrolarse en una
actividad profesional.
Si nos encontráramos ante este Dilema, antes de tomar una decisión deberíamos reflexionar si aquella actividad que deseamos llevar a cabo nos apasiona ya que de lo contrario nos faltará la fuerza e inspiración necesaria para tener éxito y sobrellevar las dificultades a las que necesariamente nos vamos a enfrentar.
Si nos encontráramos ante este Dilema, antes de tomar una decisión deberíamos reflexionar si aquella actividad que deseamos llevar a cabo nos apasiona ya que de lo contrario nos faltará la fuerza e inspiración necesaria para tener éxito y sobrellevar las dificultades a las que necesariamente nos vamos a enfrentar.
Sin convicción, motivación y compromiso será difícil que ningún
nuevo Proyecto llegue a buen puerto. Emprender
tiene sus ventajas, como ser uno su propio jefe, desarrollar la creatividad, disfrutar de una sensación de independencia y libertad pero
no olvidemos que también exige muchos sacrificios,
trabajar duro, saber soportar la presión
y aceptar riesgos.
Para ser un Emprendedor lo primero que tenemos que tener es una buena idea. Se dice con razón que las cosas ocurren dos veces. La primera
en nuestra imaginación y después en
la realidad pero no basta con tener
una buena idea, el mundo está lleno de
buenas ideas sin materializar, hay que saber aterrizarlas, ponerlas en práctica
y convertirlas en un proyecto real y
consistente. Para ello nos hará falta tener la decisión, el coraje y la
sabiduría para ejecutarla.
Corremos el peligro de enamorarnos demasiado de las mismas con la esperanza que los demás sucumbirán atraídos también ante sus encantos y ventajas. Habrá que ser especialmente crítico con esa idea que deseamos llevar a cabo y cuestionar la bondad de nuestra Propuesta de Valor sin olvidar que las mejores ideas son aquellas que destacan por su claridad y sencillez.
Corremos el peligro de enamorarnos demasiado de las mismas con la esperanza que los demás sucumbirán atraídos también ante sus encantos y ventajas. Habrá que ser especialmente crítico con esa idea que deseamos llevar a cabo y cuestionar la bondad de nuestra Propuesta de Valor sin olvidar que las mejores ideas son aquellas que destacan por su claridad y sencillez.
Tenemos que identificar las oportunidades existentes y las palancas para el Éxito. ¿Qué es lo que la hace atractiva y
diferencial..? ¿Ofrecemos algo mejor,nuevo o diferente de lo existente? ¿Cuál sería nuestro Mercado? ¿Quienes y cómo
son nuestros clientes? ¿Qué necesidades tienen? ¿Cómo las satisfacen? ¿Quién se
las ofrece y cómo? ¿Cómo podemos darla a conocer a nuestros clientes? ¿Qué
barreras de entrada tengo que superar?¿Qué hará que nos elijan a nosotros? Serán
preguntas que no pueden faltar a la hora de construir nuestro Plan de Negocio.
El otro peligro, tan malo o peor que el anterior, es no tener ninguna idea consistente ni atractiva y lanzarnos a emprender por necesidad, e incluso en
algunos casos por frivolidad. Estas
iniciativas lamentablemente nos originaran un gran desgaste personal y económico y estarán la mayor parte de las veces
abocadas a fracaso.
Cuestión crítica será contar con el soporte
financiero necesario para lanzar nuestro proyecto empresarial y llevarlo a
cabo. En los tiempos que corren este es un factor escaso con muchas
dificultades para acceder a las fuentes de financiación precisa. Será muy
aconsejable no dejarnos llevarnos por un optimismo
excesivo ya que los comienzos son siempre muy difíciles y contar con un “colchón financiero” que nos permita
aguantar el duro arranque. De lo contrario nos podemos ver en pocos meses estrangulados
financiera mente
.
Cómo no podemos hacer de todo, ni
mucho menos hacerlo todo bien es necesario que nos sepamos dejar asesorar,
buscar los apoyos y Partners necesarios, que solicitemos los ayudas precisas centrándonos en todas aquellas
cuestiones que consideramos críticas y
esenciales para la buena marcha del Negocio.
Especial atención tendremos que prestar a los Socios si decidiéramos embarcarnos en
el proyecto con algunas personas mas. Aquí como en el matrimonio hay que ver si
vamos a él libremente o bajo algún tipo de coacción. Tendremos que preguntarnos
¿Para qué necesitamos un Socio? ¿Qué me
puede aportar? ¿Nos complementamos? ¿Socio Capitalista o no? ¿Tenemos claras y
compartimos las reglas del juego?¿Son justas las participaciones?¿Cuales son
nuestros Pactos entre Socios para regir la Sociedad?
Es importante si no queremos
tener problemas a futuro el que compartamos con nuestros Socios un misma Visión y filosofía de la Vida y del Negocio. El desgaste de la convivencia,
la diferente escala de valores, las
distintas expectativas sobre el
negocio y los diferentes niveles de compromiso mostrados pueden dar al traste con el mejor de los Proyectos.
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